ApŽndice C

 

Proceso de estimaci—n

 

Esta gu’a relativa al proceso de estimaci—n fue escrita por Doug Elliot, instructor y expresidente de la FOA.


Toda persona involucrada o que estŽ pensando en adentrarse en el arte de la estimaci—n debe considerar, desde un comienzo, que antes de siquiera intentar realizar este trabajo se requieren ciertas competencias y habilidades. Si usted no tiene estas habilidades y/o no est‡ dispuesto a desarrollarlas, es posible que se enfrente a grandes problemas. Puede realizar algunos trabajos y salir airoso de ellos, pero eventualmente la ineptitud saldr‡ a la luz. 

 

Realizar estimaciones debe ser considerada como una de las actividades m‡s importantes dentro de la industria contratista. Se puede definir de la siguiente manera: una evaluaci—n profunda y completa del proyecto propuesto, en funci—n de estimaciones sobre las unidades de trabajo, los costos del material y otros factores relacionados que abarcan el proyecto por completo y, por lo tanto, la predicci—n de sus costos.

 

Un an‡lisis de los costos operativos de la mayor’a de las empresas contratistas demuestra que las actividades del departamento de presupuestos son tan importantes como las de cualquier otro departamento. 

 

Desglose aproximado de los costos:
Adquisici—n y almacenamiento 8 %
Departamento contable 18 %
Departamento de presupuestos 15 %
Gastos generales indirectos 23 %
Administraci—n 20 %
Departamento de construcci—n 16 %

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Total 100 %

 

Si los costos operativos del departamento de presupuestos comprenden un 15 % del presupuesto operativo proyectado para el contratista, ciertamente debe ser un departamento con personal altamente competente y profesional que pueda brindar estimaciones realistas, precisas y concisas. 

 

ii. El calculista:

El calculista es el factor humano de una estimaci—n. Los c‡lculos computarizados, aunque son concisos, son tan buenos como el factor humano (tal como refleja la frase "Basura entra, basura sale"). Independientemente del mŽtodo empleado, el calculista debe contar con todas las habilidades y la preparaci—n profesional necesarias para preparar una propuesta. Asimismo, dichas habilidades y preparaci—n deben complementarse con una amplia experiencia tŽcnica. Como se–ala la siguiente frase: "no se puede hablar sinceramente sobre algo que no se ha experimentado".

 

Caracter’sticas personales necesarias de un calculista:
Tacto y diplomacia

Mente met—dica
Mente anal’tica

Iniciativa 
Valor y confianza en s’ mismo

Concentraci—n 

 

Aptitudes pr‡cticas y tŽcnicas que se requieren del calculista:
Matem‡tica

Idiomas
Imaginaci—n

Experiencia pr‡ctica
Caligraf’a y escritura

Capacidad de leer y realizar anteproyectos

 

Herramientas necesarias para el calculista:
L‡pices

Calculadora
Grabadora

C‡mara
Otros Elementos de oficina

Planillas de c—mputo 

 

Tacto y diplomacia
Un calculista debe poder enfrentar situaciones distintas a las actividades normales de estimaci—n, si es que alguna vez dichas actividades pueden calificarse de normales. Dichas situaciones comprenden, por ejemplo, mantener la armon’a dentro de la organizaci—n, tratar con clientes, resolver problemas en el campo, etc. 

 

Mente met—dica
Un calculista debe poder planificar el trabajo de manera clara, concisa y met—dica. Esta es la œnica manera de controlar y verificar el trabajo, y minimizar las posibilidades de error y repetici—n.

 

Iniciativa
El calculista debe crear ciertos sistemas que luego deber‡n poder utilizarse en la preparaci—n de la propuesta. TambiŽn debe ser capaz de crear unidades de trabajo que deben reflejar las tendencias y los cambios actuales en el mercado.

 

Mente anal’tica
Muchas veces, los planos carecen de detalles. El calculista debe utilizar todas sus capacidades anal’ticas para detectar estas omisiones. Rem’tase al p‡rrafo titulado Imaginaci—n. 

 

Valor y confianza en s’ mismo
El calculista debe ser capaz de utilizar su buen juicio para establecer las unidades de c‡lculo en particular y planificar el proyecto en general. Debe demostrar que tiene el valor necesario para superar obst‡culos. El calculista trabaja conjuntamente con la gerencia y debe ser capaz de especificar y, en ocasiones, defender las cifras de la propuesta con seguridad.

 

Poder de concentraci—n
Muchas veces, un calculista debe soportar situaciones de mucho estrŽs, muy ajetreadas e incluso ca—ticas. La atenci—n al detalle y la capacidad de poder aislarse del entorno generalmente requiere mucho m‡s poder de concentraci—n que el habitual.

 

Matem‡tica
Debe tener un s—lido conocimiento de la matem‡tica. DŽjeme ejemplificar esto diciendo que muchos trabajos se han perdido por sumar err—neamente una columna de cifras. Muchos trabajos han sufrido por colocar un separador decimal en el lugar incorrecto en algœn lugar del c‡lculo o por transportar cifras err—neamente. Se puede calcular de forma err—nea o ingresar de forma incorrecta una cantidad en el c‡lculo. Por lo tanto, las cifras finales resultan ser incorrectas y usted se puede encontrar en el medio de un desorden muy costoso.

 

Idiomas
Debe tener un buen dominio del idioma inglŽs, as’ como un vasto conocimiento de todos los acr—nimos y abreviaturas. Recuerde que probablemente usted no ser‡ la œnica persona que leer‡ sus c‡lculos. Quiz‡ tenga que viajar por negocios y alguien m‡s deba tener que completar su proyecto. En este caso, es muy posible que deba entregar sus c‡lculos y c—mputos al gerente del proyecto para que pueda controlar las horas, verificar las unidades de trabajo, listas de materiales, etc. Si sus colegas no pueden leer su letra y/o cifras matem‡ticas en las planillas, no podr‡n trabajar con ellas. Existen cientos de acr—nimos y abreviaturas asociadas con la industria de las telecomunicaciones y la fibra —ptica. Debe ser capaz de manejar todas ellas con soltura.

 

Imaginaci—n
Debe poseer una imaginaci—n v’vida y habilidosa. Debe ser capaz de imaginar o visualizar c—mo se ver‡ en la realidad el proyecto terminado o porciones espec’ficas de dicho proyecto. La imaginaci—n es una habilidad adquirida que se desarrolla con la experiencia. Si est‡ montando un panel de distribuciones/de conexiones en una pared de un gabinete de telecomunicaciones, debe ser capaz de visualizar el producto terminado para poder realizar el trabajo de manera apropiada. Muchas personas carecen de esta capacidad y dejan pasar componentes o unidades de trabajo relevantes. Es dif’cil expresar cu‡nta imaginaci—n se necesita para realizar un trabajo adecuado y completo, pero, crŽame, es necesaria. A las personas que carecemos de dicha capacidad, sugiero tratar de hacer "bocetos de detalles" a fin de asegurarse que se hayan incluido todos los materiales pertinentes. Esto puede servir si tiene el mismo tipo de instalaci—n repetitiva en distintos pisos de un solo edificio.

 

Experiencia en el campo
No puedo imaginar c—mo alguien que no tiene conocimiento de la industria puede realizar un trabajo de estimaci—n adecuado y completo. No obstante, algunos logran salir del apuro, e incluso logran obtener ganancias del negocio durante un tiempo, pero, eventualmente, la verdad sale a la luz. Si usted no conoce el proyecto o la industria, Àc—mo es posible que pueda realizar una estimaci—n? 

 

Aqu’ tenemos en cuenta las comunicaciones en general y las fibras —pticas en particular. Si usted no conoce los procedimientos utilizados para instalar conectores, no sabe c—mo realizar empalmes, instalar cables (tanto de cobre como de fibra —ptica), no puede calcular el costo del trabajo. Debe tener conocimiento de las distintas l’neas de productos disponibles en el mercado, c—mo se deben instalar y c—mo se deben proteger. Si no est‡ familiarizado con el tiempo que toma y el cuidado que se debe aplicar en la instalaci—n de estos productos, no puede realizar una estimaci—n correcta del trabajo. Es muy dif’cil para m’ entender c—mo una persona ajena a la industria o un calculista novato en la industria de las telecomunicaciones y la fibra —ptica puede esperar cotizar de manera adecuada y completa un trabajo, y obtener ganancias de Žl. Solo se puede lograr con la ayuda de suerte y oraci—n.

 

Caligraf’a o escritura
Otro factor que se debe tener en cuenta a la hora de realizar una estimaci—n es la capacidad de escritura. Muchas personas me han dicho que mi letra se parece a la de un doctor, lo cual no es para nada un cumplido. Es posible que mi letra no sea la mejor, pero a la hora de realizar estimaciones, es impecable. En todas las estimaciones que hago utilizo impresiones, como lo hace la mayor’a de los calculistas. La raz—n es muy simple. La gente desea poder leer lo que est‡ escrito, es m‡s, yo quiero poder leer que est‡ escrito. Y esto es particularmente importante en tres o cuatro meses, o un a–o o dos a–os despuŽs, cuando se deba volver a un proyecto.

 

Capacidad de leer y hacer anteproyectos; 
Todo calculista debe tener la capacidad de leer anteproyectos, as’ como de poder realizar "planos detallados" y anteproyectos del sitio de la obra que sean legibles y que se puedan entender. Los aspectos m‡s importantes que debe tener en cuenta un calculista con respecto a la capacidad de leer anteproyectos son los siguientes:

 

La escala del dibujo, es decir, la proporci—n de las medidas. Por ejemplo: 1:10, 1 pulgada = 10 pulgadas, 1/4 pulgadas. = 1 pie. etc.

 

ÀLas medidas se expresan en el sistema imperial (el que se utiliza en inglŽs) o en el sistema mŽtrico?

 

Los s’mbolos utilizados para identificar los distintos tipos de equipo y los distintos tipos de instalaci—n. Por ejemplo: de instrumentaci—n, de comunicaciones, elŽctricas, etc.

 

Documentaci—n espec’fica y diagramas del equipo.

 

Las distintas elevaciones del proyecto. 

 

Herramientas requeridas:
Me aseguro de que los materiales y herramientas que utilizo a la hora de realizar las estimaciones sean de la mejor calidad posible. Recuerde que solo atraviesa esta etapa una sola vez, y es mejor hacerlo en "primera clase". 

 

Los l‡pices deben utilizarse por la simple raz—n que todos cometemos errores y es mucho m‡s f‡cil borrar los trazos de l‡piz que los de una lapicera o tinta.

 

Las calculadoras deben ser œnicamente calculadoras con impresora o rollos de papel. Las calculadoras de bolsillo no sirven para este trabajo. Tienen muy poca capacidad para almacenar informaci—n, si es que tienen alguna, y por lo tanto no cuenta con ningœn medio para revisar o cotejar sus c‡lculos posteriormente.

 

Las grabadoras son muy œtiles cuando visita el sitio de la obra o cuando piensa en algo que ser‡ de utilidad m‡s adelante. Esto puede sonar un poco tonto, pero sucede que muchos de nosotros despertamos en horas de la madrugada cuando se nos ocurre una idea. Despertamos pensando que un elemento o mŽtodo particular podr’a funcionar bien en un trabajo determinado. Ya sea escribir la idea en una hoja o grabarla en audio sirve para guardarla y analizarla en el futuro. (Una breve anotaci—n siempre es mejor que una buena memoria). La visita al sitio donde se emplazar‡ la obra puede resultar un desastre si no lleva consigo una grabadora. Si graba lo que est‡ diciendo mientras realiza la visita, esta volver‡ a su cabeza cuando escuche sus notas y, con suerte, no dejar‡ pasar ningœn asunto importante del proyecto. Es verdad que aun as’ tendr‡ que tomar medidas y realizar otras actividades, pero eso es inevitable. Lo importante es que se puede guardar una gran cantidad de detalles de manera precisa en una grabadora. MantŽngase fuera del alcance del o’do de otras personas mientras est‡ en la visita al sitio de la obra.

 

C‡maras Las c‡maras hacen milagros. Si est‡ trabajando en un edificio existente y desea tener un registro permanente de algunos detalles del lugar, puede recurrir a una c‡mara. Si se trata de una instalaci—n nueva dentro de un edificio ya existente, o dentro de un edificio nuevo en construcci—n, como dicen, una imagen vale m‡s que mil palabras, y puede revelar detalles que las personas no notan a simple vista. Es importante que siempre pida permiso para utilizar la c‡mara en cualquier lugar. Esto se debe a que los clientes o propietarios pueden pensar que usted es un esp’a industrial y ponerse nerviosos o incluso enfadarse. 

 

Elementos de oficina. La oficina de un calculista debe contar con una silla c—moda, una mesa de dibujo, banqueta, l‡pices, papel cuadriculado, sacapuntas, buena iluminaci—n, reloj, radio, gomitas o caramelos, planillas de c—mputo, pizarra, cartelera, etc.

 

Las planillas de c—mputo pueden ser simples, como una hoja con algunas l’neas y un encabezado. TambiŽn pueden ser sofisticadas, con el logotipo o membrete de la empresa, o bien puede ser algo intermedio como un bloc de notas con l’neas y columnas que se venden en las librer’as.

 

Las obligaciones de un calculista

 

Lea atentamente "Instrucciones para los licitadores"
En este documento se establece que el licitador ofrece realizar el trabajo dentro de un per’odo de tiempo espec’fico, a un precio determinado o segœn una base fija de pago, y que el trabajo se realizar‡ de conformidad con los planos, especificaciones y otros documentos contractuales que se detallar‡n en la propuesta. Este documento le proporciona al licitador instrucciones espec’ficas respecto a la fecha, hora y direcci—n del cierre de presentaci—n de propuestas, entre otras cosas.

 

Condiciones generales
Este documento tiene como objetivo especificar los impuestos aplicables, el mŽtodo de pago, los trabajos adicionales, las demoras, el seguro de responsabilidad, entre otras cosas.

 

Condiciones especiales de las especificaciones
Esta parte del documento describe los requisitos generales, como la inspecci—n del sitio, la supervisi—n, la coordinaci—n, la cooperaci—n con los ingenieros o propietarios y otros requisitos.

 

En ella se proporcionan documentos para el progreso del trabajo, como notificaciones, controversias, notificaciones de pr—rrogas, compensaciones por pr—rrogas, trabajo adicional, etc.

TambiŽn brinda una lista completa de los planos suministrados, cronogramas de construcci—n, materiales y otros equipos.

 

Se proporcionan dibujos de taller sujetos a aprobaci—n, y todas las reglamentaciones relativas a los c—digos de seguridad e incendios a nivel federal, estatal o provincial y local.

Detalla la seguridad del sitio de trabajo.

 

Especificaciones tŽcnicas
El objetivo de este documento es describir los sistemas espec’ficos como la conexi—n a tierra, la terminaci—n e instalaci—n de equipos, la divisi—n en etapas, las comprobaciones o pruebas, la verificaci—n, el arranque y la puesta en marcha.

 

Cronograma del proyecto
El objetivo de este documento es permitir que el licitador establezca la mano de obra, la supervisi—n, el equipo, las herramientas, entre otras cosas, que considera van a ser necesarias durante el proceso. TambiŽn ayuda al licitador a aplicar factores respectivos como las condiciones clim‡ticas, obstrucciones, horas adicionales, etc. a las unidades de trabajo.

 

Obligaciones relativas al proceso estimaci—n en su aspecto f’sico

 

Verificaci—n de planos y documentos

El calculista debe verificar los planos que recibi— junto con la lista de planos detallada en las Condiciones especiales de especificaci—n.

Debe separar los planos o dibujos en sistemas o secciones. Esto permite un c—mputo de los materiales m‡s f‡cil y sistem‡tico y la aplicaci—n de las unidades de trabajo.

 

Los encabezados est‡ndar son los siguientes:

Subestaciones

Iluminaci—n

Distribuci—n

Puesta a tierra

Calefacci—n

Instrumentaci—n

Motores

Control

Comunicaciones, voz, datos, seguridad, reloj

 

Visita al sitio de la obra; 
La visita al sitio de la obra o un "tour de proyecto" es tan importante como sus capacidades o competencias laborales. Al momento de realizar una visita al sitio, se debe asimilar e incorporar todo lo que se pueda. Recuerde que no visita el sitio para ver el paisaje. Est‡ all’ para recolectar datos y as’ poder armar de manera adecuada un paquete preciso y completo para la estimaci—n.

 

En una visita al sitio usted podr‡ ver los lugares reales para los equipos, el trazado para los conductos, las elevaciones apropiadas. Adem‡s, esta visita le permitir‡ aplicar los planos de arquitectura que normalmente acompa–an al paquete de licitaci—n. (Si el paquete de planos est‡ incompleto, proceda a completarlo o bien anule el proyecto).

 

La visita al sitio le proporcionar‡ una idea sobre lo que puede encontrarse cuando efectivamente concurra a la obra. Puede ver posibles obstrucciones para sus equipos cuando tengan que ingresar al sitio. Todo el trabajo podr’a tener que realizarse con escaleras de 12 escalones en lugar de andamios rodantes. Pero eso no lo sabr‡ a menos que lo vea.

 

Precisamente este es el prop—sito de la visita al sitio. Se podr’a decir que quienes no realicen esta visita tambiŽn podr’an considerar jugar al fœtbol americano con una pelota de nitroglicerina. Existen muchas "historias de terror" sobre calculistas que no tomaron en serio la visita al sitio.


C—mputo mŽtrico;
El calculista debe extraer todos los aparatos y materiales de los anteproyectos y detallarlos en las planillas de c—mputo. Este proceso de detallar los materiales y cantidades para el c—mputo mŽtrico es la parte que requiere m‡s precisi—n y atenci—n en toda estimaci—n. Las unidades de trabajo son directamente proporcionales a las cantidades de los materiales. Por lo tanto, un error de c‡lculo en una cantidad de material o aparatos afectar‡ la totalidad del resultado de la licitaci—n.

 

Este es el momento cuando los calculistas valoran la paz y tranquilidad del entorno.

Estar familiarizado con otros aspectos del proyecto, por ejemplo, la parte mec‡nica, estructural, entre otras, es un requisito para la mayor’a de los calculistas.

 

Cotizaci—n;
Una vez que se han especificado en la planilla de c—mputo mŽtrico los materiales y aparatos, el calculista debe establecer sus respectivos costos. Deber‡ efectuarse de conformidad con las especificaciones tŽcnicas y las especificaciones del fabricante detalladas en el paquete de licitaci—n. Si se le ocurre una mejor opci—n y la licitaci—n especifica que puede proponer un producto equivalente, debe presentar su idea con anterioridad al cierre de la licitaci—n para asegurarse de que pueda ser aprobada. Este procedimiento le permitir‡ al calculista verificar si la descripci—n y el precio de cada unidad cumplen con los requisitos del cliente.

 

Unidades de trabajo;
Las unidades de trabajo son los peque–os nœmeros que utilizamos para calcular el tiempo, en HORAS DE TRABAJO/HOMBRE, que se necesitar‡n para realizar el trabajo. Generalmente aparecen detalladas en horas o en un porcentaje de una hora, pero nunca en minutos. Por ejemplo: 3,6 horas de trabajo/hombre equivalen a 3 horas m‡s 0,6 o un 60 % de una hora. Esto puede resultar confuso para la persona inexperta, pero es necesario que aprenda a dominarlo r‡pidamente cuando tenga que realizar la estimaci—n de un proyecto. Las unidades de trabajo sirven como gu’a para el calculista. Es muy importante aplicar los factores de trabajo al momento de ajustar las unidades de horas de trabajo/hombre para cubrir la pŽrdida de tiempo, la pŽrdida de eficiencia, etc., relacionadas con las condiciones de trabajo.

Queda a juicio del calculista aplicar los c‡lculos de unidades de trabajo a cada art’culo material individual en la planilla de c—mputo.

 

ÀQuŽ unidades de trabajo utiliza? ÀUtiliza unidades de trabajo publicadas? ÀCrea sus propias unidades de trabajo? ÀUtiliza una combinaci—n de unidades de trabajo publicadas y propias? La œltima opci—n es probablemente la mejor, pero debe verificarse rigurosamente. Las unidades de trabajo suelen desarrollarse a medida que se hace el trabajo y/o ve c—mo se hace el trabajo. De todos modos, debe tener precauciones. Las horas de trabajo/hombre pueden ser un promedio de varios modelos de trabajo. Por ejemplo: Es posible que tenga suerte en una tarea espec’fica y solo le lleve 15 minutos realizarla.

 

Pero, en realidad, la tarea probablemente le lleve 25 minutos, y en los casos en que se aplica la Ley de Murphy, puede llevar 35 minutos. Entonces, un buen promedio ser’a 25 minutos. Particularmente me gusta utilizar unidades de trabajo publicadas de diferentes fuentes, complementadas con mi propia experiencia.

 

Trabajo que no est‡ incluido dentro del alcance las unidades de trabajo

Supervisi—n
Capacitaci—n
Asistencia de tŽcnicos de la f‡brica
Instalaci—n y remoci—n de equipo de tracci—n utilizado para la instalaci—n de cables
Anclajes, sujetadores o soportes para cables o accesorios
Etiquetas para identificaci—n de circuitos o sistemas o codificaci—n por colores
Alcance de las unidades de trabajo

Unidades de trabajo para la instalaci—n de cables

Descarga de cables e inspecci—n de da–os en la obra
An‡lisis de especificaciones, estudio de planos esquem‡ticos e identificaci—n de locaci—n
Traslado del cable hasta el lugar de instalaci—n
Tendido del cable
Retiro de exceso de material y cajas de embalaje

Unidades de trabajo para los empalmes y terminaciones de cable

Medici—n y corte de los extremos de los cables para obtener la longitud adecuada
Cable y preparaci—n para empalme o terminaci—n
Empalme o terminaci—n de cables
Lavado de los revestimientos de los cables, recubrimientos y chaquetas que se quitan para realizar el empalme

Realizaci—n de pruebas de cables y empalmes

Traslado de los equipos para pruebas desde el almacŽn de herramientas hasta el lugar del empalme
Traslado del equipo para pruebas hasta los siguientes lugares de prueba de empalmes
Instalaci—n del equipo para pruebas
Conexi—n de energ’a provisoria al equipo para pruebas
Realizaci—n de las pruebas
Grabaci—n de los resultados de las pruebas
Devoluci—n del equipo para pruebas al ‡rea de almacenamiento de herramientas

Equipo accesorio para cables de fibra —ptica

Descarga de material e inspecci—n de da–os en la obra.
An‡lisis de especificaciones, estudio de planos esquem‡ticos e identificaci—n de locaci—n
Traslado de materiales al lugar de la instalaci—n
Instalaci—n de aparatos
Retiro de exceso de materiales y cajas de embalaje

 

Suma de la planilla de c—mputo; 
Sume el costo de los aparatos y materiales en la columna 5 en la œltima l’nea de la planilla de c—mputo. Sume las "HORAS DE TRABAJO/HOMBRE" de las unidades de trabajo en la columna 7 en la œltima l’nea de la planilla de c—mputo. 

Planilla de s’ntesis;
Aplique el total de la hora de trabajo/hombre y el total de los materiales y aparatos de cada planilla de c—mputo individual a la planilla de s’ntesis.

 

Enumere todos los costos de campo, las horas extras de trabajo, el costo de los equipos y herramientas, etc. en la secci—n correspondiente.

 

Se deben tener en cuenta los aspectos comerciales y financieros de las Condiciones generales y especiales del contrato.

 

Con la ayuda adecuada del ‡rea de gesti—n, debe determinar el margen de ganancias y costos generales para aplicar a la estimaci—n.

 

Calcule el costo total de trabajo por hora e ingrŽselo en la secci—n de costo de trabajo principal.

 

Suma de la planilla de s’ntesis;
Incluya todos los totales; trabajo, materiales, impuestos, ganancias, gastos generales, etc., y entonces obtendr‡ el precio cotizado.

 

Lo que se debe y no se debe hacer en el proceso de estimaci—n

Cuando recibe el paquete de licitaci—n, retire los documentos de la Licitaci—n y gu‡rdelos en un lugar seguro hasta su conclusi—n.

 

Comience un libro para Licitaciones. Cada vez que reciba una licitaci—n, anote el nombre del proyecto, la fecha en que recibi— los documentos, la fecha l’mite para presentar la propuesta, el nombre del cliente, el nombre de los calculistas y, lo m‡s importante, el NòMERO DE CîDIGO.

 

NUNCA publique el nombre del proyecto en una cartelera, ni lo exponga en las planillas de c—mputo o de s’ntesis. En especial, nunca lo exponga en ningœn papel de trabajo que debe presentar al proveedor o vendedor para la cotizaci—n. Solo utilice el NòMERO DE CîDIGO para identificar el proyecto. Por ejemplo: M.Mouse Industries Inc. = 09FDE2300, (mes en que se recibi— la licitaci—n), FDE (iniciales del calculista), 2300 (la licitaci—n n. ¡ 23 de 2000)

 

Lamentablemente, siempre hay gente poco Žtica en el mercado que no dudar’a en sacar provecho de sus c‡lculos para poder mejorar su posici—n en la licitaci—n. El departamento de presupuestos debe ser tratado como un ‡rea segura, y debe tratar de limitar sus visitas solo a lugares seguros, como una oficina privada.

 

Algunos proveedores tienen sus propias empresas de instalaci—n. Si se trata de una empresa respetable, le informar‡n de dicho hecho, y proteger‡n su cotizaci—n. Tenga cuidado y evite aquellos que no lo hagan.

 

Debe conocer bien a los subcontratistas, proveedores, agentes inmobiliarios, etc.

 

Utilice su sentido de la Žtica. Ofrezca un precio justo, y no trate de "comprar el trabajo" bajando los precios y esperando algœn beneficio. La industria contratista ha sido devastada en los œltimos a–os por contratistas que utilizan este tipo de pr‡cticas de licitaci—n. Un precio justo, una ganancia justa y una calidad de trabajo asegurar‡n la supervivencia de la industria.

Proceso de licitaci—n

 

RFP versus RFQ 
Una "RFP, o "Solicitud de propuesta", consiste en un documento detallado preparado por una empresa, un propietario o un comprador en el cual se definen sus requisitos relativos al servicio y al equipo, que se env’a a uno o varios proveedores. La respuesta de un proveedor a una RFP normalmente ser‡ vinculante para este.

 

Una RFQ, o "Solicitud de presupuesto", es un documento de licitaci—n preparado por el comprador en donde se definen sus necesidades de servicio y equipo en tŽrminos bastantes amplios, y que se env’a a uno o varios proveedores. La RFQ es mucho m‡s detallada que la RFP. El objetivo de la RFQ o "Invitaci—n a ofertar" es obtener ofertas firmes para la realizaci—n del trabajo a un precio espec’fico o sobre bases espec’ficas. El propietario no tiene ninguna obligaci—n de aceptar ninguna de las ofertas recibidas.

 

Con frecuencia, la invitaci—n a ofertar estipula que el propietario no tiene obligaci—n de aceptar la licitaci—n m‡s baja, ni ninguna de las licitaciones. Lo que en realidad debe importar al propietario es obtener, de un grupo de contratistas, la mejor calidad de trabajo al mejor precio, y no necesariamente el menor precio por el trabajo. Si el menor precio ofertado es considerado aceptable por el propietario, como sucede en muchos casos, puede, mediante la aceptaci—n del licitador, firmar un contrato de licitaci—n. El menor precio no siempre es el mejor.

 

Algunos propietarios han adoptado un nuevo mŽtodo para la elecci—n del licitador. Se invita a cinco proveedores a licitar para un proyecto espec’fico. Cuando se presentan todas las propuestas mediante el proceso de licitaci—n, se procede a una selecci—n de la manera que se explica a continuaci—n: el licitador que ofert— el menor precio y el licitador que ofert— el mayor precio son eliminados del grupo. Las restantes licitaciones presentadas al panel de selecci—n son analizadas rigurosamente y se elige la mejor. El fin de este mŽtodo es tratar de que los proveedores sean honestos y se asegure un trabajo de calidad.

 

Uno de los problemas que surgen de la presentaci—n de licitaciones est‡ relacionado con aquel contratista que quiere retirar su propuesta. En este caso, el licitador puede retirar su oferta antes de su aceptaci—n. Para evitar esta situaci—n, el formulario de licitaci—n por lo general estipula que la propuesta es irrevocable por un determinado per’odo de tiempo. Si la propuesta se retira y el propietario sufre algœn da–o, tiene un derecho de acci—n contra el contratista.

 

Si un licitador puede establecer que su propuesta se bas— sobre informaci—n presentada por el propietario que resulta ser err—nea y que constituye, en virtud de la ley, una falsa representaci—n inocente por parte del propietario, el licitador tiene el derecho de rescindir el contrato. Sin embargo, normalmente, el propietario tiene la precauci—n de indicar en los documentos de licitaci—n que los licitadores no pueden depender de los anteproyectos, por ejemplo, para determinar las condiciones de trabajo. Deben realizar su propia investigaci—n. Por esta raz—n la visita al sitio es de vital importancia.

 

Otro problema puede surgir cuando el contratista comete un error en su propuesta, se da cuenta de ello y trata de retirarla. Normalmente, el tiempo l’mite para retirar la propuesta var’a de 24 horas a un m‡ximo de 48 horas a partir del momento del cierre de la presentaci—n de propuestas. Si la propuesta es presentada a un contratista general, el subcontratista tiene, por lo general, un per’odo de al menos 24 horas para retirar su propuesta antes de la fecha l’mite correspondiente al contratista general para presentar su propuesta al cliente.

Si la licitaci—n fue presentada con una garant’a de sostenimiento de propuesta, el contratista debe notificar de inmediato al cliente con pruebas suficientes que justifiquen el error, para as’ poder retirar la propuesta y anular la garant’a.

Debe examinar todos los documentos de la licitaci—n de manera minuciosa para asegurarse que entiende claramente los derechos tanto del propietario como del contratista. Si tiene dudas, no trate de adivinar ni tenga una actitud sumisa. Consulte a su asesor legal, quien le brindar‡ una correcta interpretaci—n de la ley. Puede no ser tan malo como parece.

Normas para la estimaci—n

 

Prop—sito

El prop—sito de una empresa al establecer est‡ndares para la estimaci—n es brindar un criterio uniforme para los c‡lculos de la licitaci—n y asegurarse de que se utilice la misma base para la elaboraci—n de informes sobre progreso y productividad del trabajo. Por lo tanto, es muy importante que estos est‡ndares se actualicen de manera continua, de manera que siempre sean v‡lidos tanto para la realizaci—n del trabajo como para su control. 

A fin de evitar complicaciones, una vez establecidas las unidades de base, estas permanecer‡n constantes, independientemente de cualquier aporte de actualizaci—n proveniente de cualquier fuente.

Las fuentes de aporte se actualizar‡n de la siguiente manera:

 

Cambios en la productividad de un tipo de industria a otra

 

Cambios en la productividad de distintas ubicaciones geogr‡ficas

 

Datos recolectados de experiencias reales de trabajo

 

Los cambios provenientes de los aportes se aplicar‡n como factores a los est‡ndares, ya sea a horas de trabajo/hombre totales o a unidades individuales est‡ndar. Se debe tomar una decisi—n sobre los c‡lculos de factoraje antes de comenzar el proceso de estimaci—n.

 

Procedimientos

 

En los informes de progreso, trabajamos con horas "estimadas" y "reales". Las cantidades "estimadas" se expresan en "unidades de trabajo" y las cantidades "reales" se expresan en "horas de trabajo realizadas por el hombre". La diferencia es muy importante, dado que las cifras "estimadas" son hipotŽticas, mientras las cifras "reales" representan el tiempo por el cual se debe pagar, ya sea que la estimaci—n haya sido correcta o no.

 

Establecimiento de la estimaci—n

La estimaci—n de la licitaci—n se determinar‡ de la siguiente manera:

 

En el formato requerido por el cliente

 

En ‡reas o sistemas dentro de formato

 

Todos los materiales deben ser detallados minuciosamente en las "planillas de cotizaci—n" y las "unidades de trabajo" est‡ndar se deben aplicar a las cantidades materiales y a otras actividades detalladas.


Al desglose se la asignar‡ un c—digo, en caso de que el cliente as’ lo solicite, para que se pueda cotejar con el "informe de progreso" y el "c—digo de cuentas", y se mostrar‡ en la "planilla de s’ntesis".

 

El Informe de progreso y el Informe de costo mensual deben permitir al gerente tener conocimiento del estado del trabajo en forma peri—dica. TambiŽn es esencial que los informes de estimaciones, de sistema de control de trabajo y de costos de oficina estŽn directamente relacionados entre s’.

 

 

 

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